La temporada solo ha hecho más que empezar, pero es muy común que en semanas de parón por partidos internacionales se empiecen a imaginar cábalas de posibles fichajes de un verano que parece lejos. En Can Barça, esta semana se ha abierto el debate de la portería. José Manuel Pinto, con 35 años, termina su contrato el próximo junio, y se mantiene la incertidumbre de su posible renovación. Es por esto que la secretaría técnica baraja varios nombres por si el portero gaditano no renovase.
El que ha sonado con más fuerza -incluso él se ha dejado querer- es Wojciech Szczesny. El portero polaco de impronunciable nombre pertenece a las filas del Arsenal, aunque no vería con malos ojos un cambio de aires. El segundo guardameta con posibilidades de recalar en el Barça es Esteban Andrada. De hecho, ya se rumoreó con su fichaje el pasado verano, pero el alto precio que reclamó Lanús frenó la operación. Los otros dos nombres suenan con mucha menos fuerza: Nikolay Mihailov, titular indiscutible del Twente, y Nicola Leali, guardameta del Brescia.
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Szcznesy en las semifinales de Champions contra el Barça |
El objetivo de este artículo no es considerar la calidad de estos futbolistas, o las posibilidades de que acaben jugando en el Barça, sino analizar si de verdad es el perfil de portero suplente que necesita el Barça. No es un secreto decir que el portero que llegue va a tener imposible quitarle la titularidad en Liga y Champions a un joven (29 años) Víctor Valdés. Por lo tanto, hay que asumir que ese portero será suplente.
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Pinto y Messi un en entrenamiento |
Después de las desventajas que comportaría fichar a un portero joven tocaría analizar los aspectos positivos. El problema es que no encuentro ninguno. Creo que el Barça debería limitarse a renovar a Pinto -ha hecho buenas actuaciones-, o seguir con la fórmula de fichar a porteros veteranos, que de momento le ha funcionado.
Sergio Vázquez Jodar
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