miércoles, 17 de agosto de 2011

Entrevista a Carles Escolan: Periodista de Radio Marca

"Los periodistas tendemos a creernos demasiado importantes"

En la primera parte de la entrevista repasamos el lado más personal de Carles Escolan, periodista en Radio Marca que sigue la actualidad del Fútbol Club Barcelona.  Escolan repasa su trayectoria como periodista hasta la actualidad. Además opina sobre temas como la imparcialidad o el forofismo. Por último nos cuenta cómo son los jugadores de cerca.

En la segunda parte, que estará colgada mañana mismo en El Iniestazo, Escolan repasa temas de actualidad deportiva, sobre todo centrados en el Fútbol Club Barcelona, debido a su cercanía con el conjunto azulgrana.

En el fragmento de hoy, Escolan no muestra su lado más personal.

- ¿Cuál ha sido tu trayectoria como periodista hasta el día de hoy?
Ha sido un poco complicado, ya que he ido de un sitio a otro. Empecé con 19 años con Ricard Vicente en Onda Cero -el programa pasó a Radio Marca en 2003- haciendo partidos de preferente, primera catalana, tercera y Segunda B. Mientras, en 2000 hice prácticas en Rac1, en el 2001 hice de inalámbrico en los partidos del Martorell en división de honor de fútbol sala, luego estuve año y medio en Radio Sabadell, cubriendo baloncesto, tennis de mesa, y balonmano, deporte en el cual me empecé a especializar.  Más adelante, ya en 2004, me dijeron q abrían Radio Marca en Barcelona y me presenté en la redacción para ofrecer mis servicios. Después de que me dijeran que no podían contratar a nadie, yo lo arreglé mediante un convenio de prácticas con mi universidad. Dos días después debuté en Radio Marca. Ahí hice de productor y pasé a hacer los partidos del Barça de balonmano. Acepté a hacer el matinal, de 6 a 8. De ahí pasé a cubrir al Nàstic cuando estuvo en Primera División. Finalmente, quedó libre la vacante para informar sobre el Barça y confiaron en mí.

- ¿A qué te dedicas en la actualidad?
Me dedico a cubrir la actualidad diaria del Barça y a hacer de inalámbrico en los partidos, ya sea en casa o fuera. Lo combino, si me necesitan con la edición Tribuna Marca o Marca Barça. Además narro partidos de balonmano, tanto del Barça como de la selección española.

- ¿Tienes algún proyecto de futuro relacionado con tu trabajo?
A nivel laboral no me quejo. Hago lo que he querido hacer siempre. Tengo la suerte de haber estado en finales y títulos, y contarlos, pero me encantaría estar en una Eurocopa, en un Mundial o en unos Juegos Olímpicos.


- ¿Cuál es la mayor satisfacción que aporta tu trabajo?
Hacer lo que me gusta. Con 6 años cogía juguetes de la época, como Clicks o G.I. Joe, hacía un equipo de fútbol, con canica como balón, y narraba el partido. Luego vino la Sega Master System, y por último la Megadrive. Me acuerdo que ponía hasta los nombres de los jugadores... me pasaba horas jugando y narrando, mientras mi padre me decía que me callara. La verdad es que estoy muy orgulloso de mi familia y de mi pareja. Han sabido entender mi trabajo, ayudarme y apoyarme. Y no es fácil, porque son muchas horas, y  hay que estar siempre pendiente, e incluso a veces hay que cancelar planes que tenías organizados. Ellos son siempre de ayuda, y también me aportan una increíble satisfacción, porque sin ellos no sería lo mismo. 

- ¿Es posible ser imparcial en los medios?
Sí, es posible ser imparcial. Pero hay que entender que en el mundo del periodismo la objetividad no existe. Puedes informar, puedes explicar, puedes dar tu visión, pero nunca podrás ser objetivo. Cada uno viene de un sitio, tiene unos intereses y se relaciona. La única objetividad posible sería la de alguien que no se relaciona con nadie. Y eso en el periodismo es imposible, porque tú tienes relación con tus compañeros, trabajas con los jugadores, que te pueden caer mejor o peor. Por mí parte, intento siempre ser lo más ecuánime posible, pero reconozco que objetivo no soy, porque no se puede. Lo que es cierto es que muchas veces solo informas, hay noticias que no tienen debate posible. Pero en la mayoría de los casos das tu opinión y tu percepción, por lo tanto ya no es objetivo. La objetividad pura no existe. Se puede ser ecuánime, informar y no mojarse. Aunque es difícil no basarte en tus opiniones para informar, sobre todo en radio.

- Lo que dicen muchos periodistas es que, al intentar ser imparcial o informar para mucha gente, pierdes los colores por tu equipo, o al menos el forofismo ¿Es eso cierto?
Sí, es cierto. Antes cuando el Sabadell o el Barça perdían me cabreaba muchísimo y culpaba a los árbitros, jugadores y entrenadores. No es que ahora me dé igual, pero si le tengo que dar caña a mi equipo, se la doy. Hoy mismo he dicho que los jugadores del Barcelona han estado mal al anunciar el fichaje de Cesc, porque se han saltado a los jefes de prensa. Y lo mismo cuando juegan mal. Empecé a trabajar en esto en la última temporada de Frank Rijkaard, y fue una temporada dura. Este es solo un ejemplo que demuestra que aprendes a distanciarte. Nunca pierdes tu pasado, pero miras al futuro de otra manera, y aprendes a relativizar las cosas. Te das cuenta de que la gente le da demasiada importancia al fútbol. Hoy por hoy, hay gente que se muere de hambre en Somalia, hay disturbios en Londres, hay cinco millones de parados. Es cierto que una radio deportiva tiene que vivir de eso, pero en la calle se habla de la huelga de la AFE, de Cesc, de la Supercopa de España... hay una especie de obsesión, y puede ser peligrosa. El problema es que cada vez vemos más forofismo, más ataques indiscriminados, más tertulias donde se roza la pantomima, como en Punto Pelota. Pero esta pantomima solo la entendemos la gente que trabajamos en esto. También es cierto que se habla más por lo mal que está la situación. Por eso los periodistas nos alejamos un poco de eso. Te das cuenta de que todo lo mueve el dinero. Quizás de tanto trabajar en esto, no te llegas a cansar nunca, aunque sí tiendes a relativizarlo. Además no eres periodista las 24 horas del día, aunque haya gente que así lo crea. Por último, también hay que tener cuidado, porque tú de alguna manera está de cara al público. Los periodistas, y me incluyo, tendemos a creernos demasiado importantes, y eso hay que ir con calma. Por eso lo miras desde fuera, y es cuando lo relativizas todo. Ni trabajar en el Barça es tan bonito como la gente piensa, ni ser periodista es tan bonito como la gente piensa, ni soy mejor que otra persona por ser periodista. Sé que muchos estudiantes de periodismo se cambiarían por mí, y yo también lo hubiera hecho. Está clarísimo que tiene más ventajas que inconvenientes, aunque no es tan bonito como se ve desde fuera, porque hay muchas presiones, hay que estar cada día atento. Repito que lo bueno gana a lo malo, pero todas estas circunstancias te ayudan a perder ese forofismo. Tu trabajo pasa por delante, aunque tiene que quedar claro que siempre quieres que gane un equipo. Ya sea porque si ganan tu trabajo vaya a ser más fácil o por interés personal.

- ¿Tienes contacto con los jugadores?
Tengo contacto con algún jugador, nos mensajeamos, pero cuesta hacerte "amigo" o conocido de un jugador, porque saben que si te acercas, es por algo. Siempre que me he acercado a un jugador, lo he hecho sin querer nada de él.

- ¿Cómo son las estrellas fuera de cámaras?
Cuando en ocasiones contadas voy a cenar con algún jugador, no le hablo de fútbol.  Hablamos de nuestras vidas nuestras familias... de nada de fútbol. Si él quiere, ya te cogerá confianza y te dará noticias. Hasta ahora no he tenido tanta confianza con ningún jugador.

- ¿Qué te sorprende de ellos?
Me sorprende que son personas. Económicamente no lo pasan mal, pero sufren por otras cosas. No pueden hacer cosas, disfrutar de una vida normal de un chaval de 20 años que tiene una pasta tremenda y puede hacer lo que le da la gana. Son mucho más cercanos de lo que pueda parecer. Hay jugadores que tienen fama de lo que no son. Y al revés también puede ser.


Parte II


Carlos Camacho Rabanete (@Carliins17), Miguel Ángel García (@migueel10), Òscar Raposo Aymerich (@oskkar4) David Santos Merino (@daaviddd13) y Sergio Vázquez Jodar (@Sergiovazquez14)

El Iniestazo en Twitter

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es muy desagradable oír a Carles E. Siempre enlodando al Barcelona y sus directivos, se nota su timbre de voz como disfruta con todo lo negativo que pueda comentar del Barça, Lamentable.
Yo personalmente le detesto.

Publicar un comentario